Los templos de isla de Philae, Filae o Filé, son Patrimonio Mundial de la UNESCO. Su vista es imprescindible en todo viaje que se precie a Egipto. En la Nueva Isla de Philae se puede visitar el Pabellón de Nectanebo I, el Templo de Hathor construido por Ptolomeo VI, el templo dedicado a la diosa Isis y el bonito Quiosco de Trajano.
La Nueva Isla Philae está cerca de la antigua presa, a 9 km al sur de Asuán, aunque en algunos mapas se la sigue llamando como la isla de Agilkia. Los templos que se encontraban originalmente en isla de Philae fueron reubicados hasta la isla de Agilkia, a tan solo unos 500 metros, durante la construcción de la presa Alta de Asuán. Esto fue posible gracias al dinero que se recaudó mediante numerosas campañas que hizo la UNESCO y a donaciones. La isla de Agilkia fue moldeada y se renombró como la nueva Isla de Philae.

Cómo ir a los templos de Philae
A pesar de haberle cambiado el nombre por el de Nueva Isla Philae, la gran mayoría omitimos lo de «nueva» y la llamamos Isla de Philae, aunque en algunos mapas se sigue llamando la Isla de Agilkia.
Horario de apertura de los tempos:
De lunes a domingo de 07:00 a 16:00 horas.
La venta de entradas para la visita a los templos de Philae se encuentra cerca del embarcadero del pueblo Shellal, a 9 km al sur de Asuán, en la antigua presa, por lo tanto se ha de ir primero por carretera. Las entradas se han de pagar en efectivo en la taquilla.
En el muelle se ha de negociar el precio de los trayectos de ida y vuelta con el barquero de turno.
Si haces tu reserva a través del siguiente enlace, sin ningún coste adicional, puedes contribuir económicamente al mantenimiento de mi blog:

Mi visita a los templos de Philae
Pasé el ticket de entrada por el lector del torno y después, en el puesto de control, puse la mochila y el bolso en la cinta para que pasaran por el escáner, y finalmente pasar hacia el acceso al embarcadero.
Tras recoger mis cosas caminé entre paraditas ambulantes de recuerdos, hasta llegar al embarcadero donde habrían más de veinte taxis acuáticos, nuestro guía nos indicó en cual embarcar. No habían muchos turistas ya que era la hora de comer.
El barquero puso el motor en marcha, y después rumbo hacia los templos helenísticos y nubios de Philae.

El hecho de subir al barquito le da a la visita a Philae un plus de romanticismo y exotismo que por un momento me trasportó a los tiempos de los faraones cuando surcaban el Nilo con toda su pompa, si no fuera por el ruidoso sonido del motor de la lanchita… Al poco tiempo dejé de oir el ruido del motor y conforme íbamos acercándonos crecía mi entusiasmo y un poco de nerviosismo, característico de cuando un sueño se va ha hacer realidad.
Estaba completamente absorta en mis pensamientos, y no se el tiempo que tardó la motora en llegar al pequeño embarcadero, pero creo que serían unos pocos minutos.

Tras bajar de la barca subimos unos peldaños del muelle flotante y nos despedirnos del barquero nubio que nos llevó a la isla. Subí desde la plataforma de madera unos peldaños más, que conducen hasta una pasarela de madera con barandillas metálicas y que dan acceso a la isla.
Al primer edificio que se llega desde el embarcadero, que está a la izquierda, es al Pabellón de Nectanebo I. Es el más antiguo, su pórtico tiene 14 columnas hathóricas muy decoradas, que me parecieron muy elegantes.
La diosa Hathor está muy presente en la mayoría de templos, junto con su marido Horus.

Y a continuación viene el monumental Templo de Isis con sus anexos: la Casa Natal y los dos pilones o monumentales entradas. La diosa Isis fue la más venerada, porque gobernaba los cielos, el mundo natural y además tenía poder sobre el propio destino ayudando en el paso al Otro Mundo.
La diosa Isis está también muy representada porque, en el antiguo Egipto, creían que las imágenes tenían el poder de devolver a la vida, y era una protectora del reino frente a sus enemigos.
Desde la barca, a lo lejos, ya me impresionaron los dos pilones del templo de Isis, pero cuando me acerqué y comprobé su tamaño me quedé con la boca abierta. Se siente la magia de estar en uno de los templos más venerados del antiguo Egipto.

También es donde todos nos hacemos la foto y donde se concentran la gran mayoría de guías explicando los detalles de los relieves, las figuras de los pilares, los capiteles en forma de papiro.
Cuando llegamos no habían muchos turistas y pudimos hacer algunas fotos sin gente… Nuestro guía nos estuvo dando algunos datos históricos y explicándonos un poco cómo era la vida de los sacerdotes en el templo de Isis.
Por cierto, en la parte derecha del marco de la puerta del primer pilón, puede verse un texto grabado donde figura el nombre de Bonaparte. Fue hecho por la expedición científica a las órdenes de Napoleón como recuerdo del paso por Philae durante su campaña napoleónica en Egipto.
Continuamos la visita tras pasar el primer pilón, continuamos por su patio, y tras atravesar el segundo pilón entramos en el interior del templo de Isis, que durante el cristianismo fue reconvertido en iglesia copta.

Dentro del templo vi grabadas unas cuantas cruces coptas en algún pilar y en las paredes, porque el templo se utilizó como iglesia durante el cristianismo.
Sorprende la gran cantidad de figuras talladas, algunas de ellas lamentablemente dañadas por los primeros cristianos y después por los musulmanes, sobre todo en la cara, manos y la zona de los genitales. Sin embargo otras imágenes de dioses y diosas, sorprendentemente están intactas.

Estando todavía en la visita guiada dentro del santuario, empezaron ya a llegar turistas con el jolgorio y griterío que suele acompañar en este tipo de monumentos tan espectaculares. Después de hacer unas cuantas fotos continúe mi visita por el exterior.
El Templo de Hathor, construido por Ptolomeo VI, está finamente decorado con relieves en los que se pueden ver músicos y el dios Bes. Curiosamente no hay imágenes de la diosa Hathor.
A su lado está el bonito Quiosco de Trajano o cama del faraón. Era el lugar donde llegaba la barca sagrada con la estatua de Isis y donde descansaba durante sus procesiones por el Nilo.

El Quiosco de Trajano tiene 14 columnas que simbolizan los pedazos en los que fue cortado Osiris, y en dos de las columnas pueden verse imágenes talladas de Adriano realizando ofrendas al Isis, Osiris y Horus. Inicialmente se encontraba en la antigua Isla de Philae, pero se decidió ubicarla en la Nueva Isla de Philae por cuestiones practicas.
Después volví sobre mis pasos para poder ver el lado opuesto. Ya había mucha gente visitando la isla, y me dirigí hasta la Puerta de Adriano, que está al lado del segundo pilono. Pasa un poco desapercibido porque queda muy poquito de él, y está decorado con imágenes y jeroglíficos.

Tras la visita volví al Templo de Isis para hacerle las ultimas fotos. Después me dirigí hasta el embarcadero y de vuelta a Asuán, donde dimos un pequeño paseo en faluca para ver la puesta del Sol desde el Nilo.
Finalmente regresamos al crucero para darnos una ducha y asistir a nuestra primera cena a bordo.

En el bufet libre había mucha variedad y Jose se puso las botas con el postre. De camino al camarote pasamos por la tienda de chilabas, donde conocimos una pareja de egipcios con los que hicimos muy buenas migas y muchas risas. Al día siguiente tocaba la visita al Templo de Kalabsha, pero eso ya forma parte del siguiente artículo.
Te dejo varias opciones de actividades en Asuán, sin coste adicional para ti y podrás contribuir económicamente al mantenimiento de mi blog:
Notas de la historia de los templos de Philae
El templo más popular en la antigua Isla de Philae fue el consagrado al culto de Isis, construido por los Ptolomeo con sus 400 metros de largo por 135 de ancho. Philae era conocida por los antiguos como Pilak (isla de ángulo o de la esmeralda), por encontrarse en la orilla oriental de la primera Catarata. La mismísima Cleopatra y otras mujeres faraón de su dinastía se identificaban y se representaban como la diosa Isis.
Estaba situada frente a la sagrada Isla de Biga, por ser el lugar del sueño eterno del marido de Isis, el dios Osiris. Estaba prohibido el paso a excepción de para los sacerdotes, que se desplazaban en barca hasta Philae para celebrar sus ofrendas.

Durante miles de años la Isla de Philae fue un importantísimo centro religioso, al que llegaron peregrinos procedentes de todo el mundo para venerar a la diosa Isis, incluso en los inicios del cristianismo. Era tradición que los devotos de Isis peregrinaran por lo menos una vez al año a la isla sagrada de Philae a ofrecer ofrendas a la diosa Isis. En las tiendas del templo los mismos sacerdotes vendían las ofrendas.
Como anécdota uno de los sacerdotes de templo de Isis llamado Esmet-Akhom en el año 394 talló la última inscripción jeroglífica. Fue en el siglo VI cuando el emperador romano Justiniano I prohibió el culto a Isis.

Los ingleses tras la ocupación de Egipto, construyeron la primera Presa de Asuán en 1898, para poder controlar las crecidas y tener suministro de energía eléctrica para abastecer Egipto, pero por contra la Isla de Philae con sus templos se quedaba anualmente sumergida parcialmente bajo las aguas durante medio año.
Para ampliar la presa y poder controlar mejor las crecidas del Nilo, y tras la independencia del Reino Unido, los egipcios construyeron la Presa Alta de Asuán creando el lago Nasser, para mantener las dos plantas hidroeléctricas, Asuán I y II con el agua que se descarga desde la Presa Baja hasta la Presa Alta o la Gan Presa, lo que inevitablemente sumergiría bajo las aguas a la Isla de Philae para siempre. Pero antes la UNESCO decidió rescatar los templos de Philae y trasladarlos a la Isla de Agilkia, a solo unos 500 metros de la Isla de Philae original. No tuvo la misma suerte la vecina Isla de Binga o Bigeh, que en parte quedó sumergida.
La perla del Nilo: Los Templo de Philae

Arqueólogos de todo el mundo financiados por la UNESCO y numerosos gobiernos, desmontaron el Templo de Philae y lo volvieron a montar en la isla de Agilkia, mucho más alta y a tan solo 500 metros de distancia de la isla original. Recortaron la isla para que tuviese la misma forma que la isla original y poder poner los monumentos en la misma orientación, y se renombró como la nueva Isla de Philae.
Cuando empezaron los trabajos de salvamento, parte de los templos estaban semisumergidos bajo el agua del Nilo, para aislar toda la zona se rodeó con dos filas de 17.000 tablas metálicas y se rellenó el espacio entre ambas barreras con arena formando un dique, para luego desecar el interior y retirar el limo. Una vez limpios se desmontaron los templos y finalmente se trasladaron a la nueva isla.

Al igual que con los templos de Abu Simbel, todo este trabajo fue hecho a contra reloj mientras que el gobierno egipcio, con la ayuda de los rusos, continuaban con la construcción de la Alta Presa, y poco les importaba o nada lo que les ocurriera a los templos de los faraones, así que si algún guía egipcio remarca el gran trabajo hecho por Egipto… no es cierto, se pusieron las pilas a última hora cuando casi todo el trabajo estaba hecho por otros países con donaciones de todo el mundo, y gracias a la conciencia social que generó la UNESCO con numerosas y variadas campañas mundiales, como por ejemplo la creación de sellos de postales en muchos países en los que un tanto por ciento del precio iba destinado a subvencionar el costo del salvamento de sus templos.

En el año 1972 con el dinero recaudado en todo el mundo la UNESCO empezó el trabajo de salvamento con los templos de Abú Simbel, que también fue muy costoso. Y en el año 1977 se empezaron con los trabajos en la isla de Philae, que finalizaron el 10 de mayo del año 1980 cuando por fin se abrieron al público para la visita.
Según la mitología, Isis velaba a su marido Osiris

La ubicación del Templo de Isis en la antigua isla de Philae no es casual, puesto que estaba cerca de la primera catarata, donde los antiguos egipcios creían que era el lugar de donde provenían cada año las crecidas del Nilo, fertilizando los campos con el limo, debido a las lágrimas de la diosa Isis que añoraba a su esposo y hermano el dios Osiris, que fue asesinado por su envidioso hermano el dios Set y después descuartizado y esparcido en pedazos por todo Egipto.
La diosa Isis velaba la tumba de su marido Osiris desde la antigua Isla de Philae, que estaba situada justo enfrente de la sagrada Isla de Biga o Bigeh donde estaba la tumba del dios Osiris, en el Templo del Abatón.
Hay que resaltar que en el antiguo Egipto se creía en la magia y en el poder de las diosas y dioses, que a través de las estatuas podían cobrar vida.

Mis sugerencias después de la visita al Templo de Philae
Imprescindible llevar en la mochila crema solar, gafas de sol, un sombrero o gorra. Incluso en invierno el Sol y también el resol reflejado por las piedras de los templos, o el agua del Nilo, pueden ser intensos y cegadores.
Con el calor conviene llevar siempre agua fresquita o refrescos para hidratarse. También se pueden comprar en el bar que hay en la isla, eso sí, a mayor precio que en el supermercado.
Aunque en general los egipcios están acostumbrados la forma de vestir occidental de los turistas, sugiero que las mujeres lleven pantalones cortos y poco de escote, por ser un país de mayoría musulmana y por respeto a su cultura ir un poco más recatadas, con una camiseta de tirantes anchos y unos pantalones cortos sin enseñar el cachete.

Aunque parezca mentira…. una prenda imprescindible es un polar o cortavientos, porque el aire acondicionado en el transporte público y en los cruceros lo ponen como si lo fuesen a prohibir, así que si no quieres traerte un buen constipado a tu vuelta, llévate algo de abrigo.
Deseo haberte hecho disfrutar de lectura, sorprendido o resultado útil mi visita al Templo de Philae, y si te apetece que me acompañes en la visita a los templos de la Isla de Kalabsh.
Si haces algún comentario será bienvenido.
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NOTAS VIAJERAS
Por las noches hay un espectáculo de luz y sonido, en el que se iluminan los templos al son de la música y una voz en off narra la historia de la diosa Isis y de su marido-hermano el dios Osiris. Se realiza en varios idiomas.
Por la noche suele hacer refrescar, por lo que es conveniente llevar ropa abrigo, especialmente en invierno.
En la Isla de Philae son muchos los relieves en los que se representa a dioses y diosas del antiguo Egipto y te puede servir de ayuda las tres pequeñas guías, que me hice con los dioses más representadas y saber quien es quien.
Mitología egipcia I
Mitología egipcia II
Diosas y dioses del más Allá: Mitología egipcia III
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Booking.comSUSCRIPCIÓN
2 comentarios
Qué bonito diario de viajes sobre Egipto estás construyendo. Enhorabuena!!
Autor
¡Muchas gracias Javi!
Me alegra mucho que te guste.
Un beso.
Carmen