La ciudad Imperial de Meknés lo es porque Moulay Ismaïl reinó en ella. El sultán alauita espolió las ruinas de romanas de Volubilis y Marrakech para embellecer Mequinez. Tras su muerte, ningún otro sultán reinó desde ella. Fez pasó nuevamente a ser la nueva ciudad Imperial, y Meknés entró en decadencia, sirvió al sultán de turno como fin de etapa entre Fez y Rabat.